Nunca llueve a gusto de todos: daños en espárrago y cereal en la cuenca del Tajo y alivio para el sureste de Albacete

Tras 25 días lloviendo sin parar, la situación para los agricultores y ganaderos de la región es irregular. Mientras hay explotaciones inundadas en la cuenca del Tajo, en Toledo y Guadalajara, las lluvias han sido un alivio para las zonas del sureste de la región, Albacete y Cuenca, que llevan encadenando tres años de intensa sequía.

Así, según el primer balance que ha realizado la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha (UPA CLM), hay preocupación ante los “graves daños ocasionados por las recientes lluvias en las explotaciones agrícolas y ganaderas de las provincias de Toledo y Guadalajara”.

En Toledo se han registrado daños considerables en infraestructuras rurales, caminos y cultivos, con muchas zonas ganaderas afectadas por la imposibilidad de acceso a las explotaciones. Las precipitaciones han afectado tanto las vías de comunicación como la producción agrícola, complicando el día a día de los productores locales.

En Guadalajara, “los daños son igualmente severos”, especialmente en el cultivo de cereal, donde muchas parcelas no se podrán recuperar debido a la asfixia causada por el exceso de agua. En la Campiña, el espárrago ha sido uno de los cultivos más perjudicados, con grandes áreas completamente inundadas. El cultivo de cereal, por su parte, ha resultado afectado en toda la provincia, “comprometiendo gravemente las cosechas”.

Alivio para el sureste, Cuenca y Albacete

También la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha realizado un primer balance del impacto en el campo de las lluvias. Para ello, en términos generales, las precipitaciones han supuesto un alivio significativo a la sequía, especialmente en el sur y este peninsular, donde las reservas hídricas han experimentado un notable incremento (+14%).

Por ejemplo, la cuenca del Tajo: ha pasado del 54,4% en diciembre de 2024 al 75,0% en marzo de 2025, con un aumento de 20,6 puntos porcentuales.

Por ello, la organización apunta que en Castilla-La Mancha, así como Castilla y León, Aragón, Galicia y Comunidad de Madrid, la lluvia ha beneficiado los cultivos de secano, como los cereales, viñedo y olivar, al mejorar la humedad del suelo en pleno inicio del ciclo vegetativo. Asimismo, los pastos han mejorado de forma notable, lo que supone un alivio para la ganadería extensiva, tras meses de escasez en un invierno más seco de lo habitual.

Concretamente, el albaceteño Joaquín Vizcaíno,  responsable nacional vinícola de COAG, ha señalado la importancia de las precipitaciones para el sureste de Albacete. “En líneas generales han sido muy bien acogidas porque no han caído de manera torrencial, solo hay que señalar pequeñas zonas con inundaciones en la zona del Tajo, pero en líneas generales han venido muy bien en esta zona de Albacete que llevaba en una situación de extrema sequía durante tres años seguidos en los que apenas había llovido, con problemas en viñedo, y necesitábamos este cambio de tendencia porque los cultivos de secano si no tienen una viabilidad muy complicada”, ha señalado.

Martínez Lizán: las lluvias han sido “una bendición”

En el mismo sentido, se ha manifestado el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, que ha descrito estos días de lluvias como “una bendición” para la provincia de Albacete, la comarca de la Manchuela conquense y algunos municipios de Ciudad Real con una media registrada de “150 a 200 litros por metro cuadrado”.

Estas precipitaciones vienen a paliar la sequía “alarmante” que lleva casi tres años registrando estas zonas de la región y, aunque Martínez ha señalado que “las lluvias han hecho más bien que mal” en Castilla-La Mancha, también ha pedido paciencia a los agricultores de las zonas que han padecido inundaciones, principalmente en la provincia de Toledo, donde los técnicos agrarios entrarán en los próximos días a hacer una valoración pormenorizada de los daños sufridos. “Estas lluvias van a garantizar la continuidad de algunos cultivos y la recuperación de otros”, ha valorado el consejero.